Nos quieren engañar... ¡¡confundir!!... ¿¿Holywins??... ¡¡Pamplinas!! Que cada cosa tiene su momento y éste, por más que quieran darle la vuelta, es tiempo de misterio, de fantasmas que no tienen nada mejor que presentarse de madrugada, de murciélagos que se te enredan en el pelo, de retratos de bisabuelos que mueven los ojillos, de velas que se apagan sin razón y de ruidos en el desván.
Me declaro defensora de Halloween... Y no porque quiera que se institucionalice en este país. No me parece bien que se celebre en los colegios ni que los niños paseen de casa en casa fingiendo ser de Wisconsin... Pero quizá sí darle una oportunidad en petit comité... Una sutil manera de recuperar antiguas tradiciones que, aunque ya olvidadas, algún día sí fueron nuestras.
Que a mi me gusta "ir de misterio" y algo tiene esta época y esta fiesta que tanto engancha... Así que, un año más, me atrevo con una receta especial para Halloween, All Hallow´s Eve, Samhain o día de todos los Santos: FANTASMAS DE MERENGUE.
UTENSILIOS
-Batidora eléctrica con varillas.
-Manga pastelera.
-Boquilla redonda para la manga (si no se tiene nos podemos apañar cortando en recto el pico de la manga).
INGREDIENTES:
-2 claras de huevo (a temperatura ambiente).
-85gr de azúcar glass.
-1 pizca de sal.
-1 cucharadita de zumo de limón.
-Un poco de chocolate para decorar.
1. Precalentamos el horno a 100º (calor arriba y abajo).
2. Ponemos en un cuenco las dos claras con la pizca de sal y empezamos a batir hasta que se pongan espumosas y doblen su tamaño.
3. Entonces incorporamos el zumo de limón y seguimos batiendo.
4. Cuando los "picos" que forman las claras son blandos, empezamos a añadir el azúcar poco a poco hasta que forme picos más sólidos. Si giras el cuenco y el merengue no se derraman, ya estará listo.
5. Rellenamos la manga con el merengue. Como yo no tenía una boquilla redonda, simplemente he cortado el pico de la manga en recto, aunque si la tenéis mejor porque os facilitará la formación de los fantasmas.
6. A continuación sobre una bandeja de horno, colocamos una lámina de papel de horno y empezamos a formar los fantasmas. No te preocupes si los primeros no te salen muy bien, los siguientes saldrán mejor. Sin hacer giros con la manga, déjala fija, y suelta un "churrete" de merengue sobre la bandeja. Separa un poco, encima vuelve a soltar merengue y vuelve a hacer lo mismo. No es complicado.
7. Introducimos la bandeja en el horno durante una hora.
8. Una vez que nuestros fantasmas de merengue estén fríos, derretimos un poco de chocolate y con la ayuda de un palillo le pintamos los ojitos.
MÁS COSILLAS:
-Puedes añadir esencia de vainilla si quieres darle un toque de sabor.
-También puedes colorear estos fantasmas añadiendo algún colorante alimentario.
-Estos fantasmas de merengue te pueden servir para decorar muchos postres de Halloween, como por ejemplo una tarta.
-Además de fantasmas, puedes hacer huesos, calaveras, etc.
¿SABÍAS QUE...?
En España ya se celebraba Halloween antes de ponerse de moda en EEUU. Por un lado encontramos una antiquísima tradición pagana llamada Samhain ("fin del verano") en la que los celtas, coincidiendo con el inicio del frío y la oscuridad, celebraban el final de la época de las cosechas y el buen tiempo. Las leyendas decían que en esa época de oscuridad los espíritus regresaban y se mezclaban entre los vivos con el fin de llevarse algunas almas. Por ello, para engañar a los muertos y no ser llevados, se disfrazaban de espíritus y les dedicaban ofrendas. Esta tradición se extendió por las islas Británicas, gran parte de Centroeuropa y llegó a la Península Ibérica con los celtas que llegaron al norte y posteriormente se extendió por el resto del territorio con la expansión de los pueblos celtíberos.
Por otra parte, en el siglo IV, comenzó a celebrarse el día de Todos los Santos. Este día caía en el 13 de mayo y en él se honraba a todos los mártires. A partir del siglo VIII la festividad fue trasladada al 1 de noviembre por orden del Papa Gregorio III con intención de hacer desaparecer la fiesta pagana de Samhain.
Por lo tanto, lo que hoy conocemos como Halloween no es más que la evolución de una serie de tradiciones y celebraciones que se vienen celebrando desde la antigüedad y a la que se le han ido añadiendo nuevos elementos más modernos y consumistas. En España aún hay regiones, como Galicia y Asturias, donde aún se celebra lo que ellos llaman "Samaín". (Info: blogs.20minutos.es)
UTENSILIOS
-Batidora eléctrica con varillas.
-Manga pastelera.
-Boquilla redonda para la manga (si no se tiene nos podemos apañar cortando en recto el pico de la manga).
INGREDIENTES:
-2 claras de huevo (a temperatura ambiente).
-85gr de azúcar glass.
-1 pizca de sal.
-1 cucharadita de zumo de limón.
-Un poco de chocolate para decorar.
1. Precalentamos el horno a 100º (calor arriba y abajo).
2. Ponemos en un cuenco las dos claras con la pizca de sal y empezamos a batir hasta que se pongan espumosas y doblen su tamaño.
3. Entonces incorporamos el zumo de limón y seguimos batiendo.
4. Cuando los "picos" que forman las claras son blandos, empezamos a añadir el azúcar poco a poco hasta que forme picos más sólidos. Si giras el cuenco y el merengue no se derraman, ya estará listo.
5. Rellenamos la manga con el merengue. Como yo no tenía una boquilla redonda, simplemente he cortado el pico de la manga en recto, aunque si la tenéis mejor porque os facilitará la formación de los fantasmas.
6. A continuación sobre una bandeja de horno, colocamos una lámina de papel de horno y empezamos a formar los fantasmas. No te preocupes si los primeros no te salen muy bien, los siguientes saldrán mejor. Sin hacer giros con la manga, déjala fija, y suelta un "churrete" de merengue sobre la bandeja. Separa un poco, encima vuelve a soltar merengue y vuelve a hacer lo mismo. No es complicado.
7. Introducimos la bandeja en el horno durante una hora.
8. Una vez que nuestros fantasmas de merengue estén fríos, derretimos un poco de chocolate y con la ayuda de un palillo le pintamos los ojitos.
MÁS COSILLAS:
-Puedes añadir esencia de vainilla si quieres darle un toque de sabor.
-También puedes colorear estos fantasmas añadiendo algún colorante alimentario.
-Estos fantasmas de merengue te pueden servir para decorar muchos postres de Halloween, como por ejemplo una tarta.
-Además de fantasmas, puedes hacer huesos, calaveras, etc.
¿SABÍAS QUE...?
En España ya se celebraba Halloween antes de ponerse de moda en EEUU. Por un lado encontramos una antiquísima tradición pagana llamada Samhain ("fin del verano") en la que los celtas, coincidiendo con el inicio del frío y la oscuridad, celebraban el final de la época de las cosechas y el buen tiempo. Las leyendas decían que en esa época de oscuridad los espíritus regresaban y se mezclaban entre los vivos con el fin de llevarse algunas almas. Por ello, para engañar a los muertos y no ser llevados, se disfrazaban de espíritus y les dedicaban ofrendas. Esta tradición se extendió por las islas Británicas, gran parte de Centroeuropa y llegó a la Península Ibérica con los celtas que llegaron al norte y posteriormente se extendió por el resto del territorio con la expansión de los pueblos celtíberos.
Por otra parte, en el siglo IV, comenzó a celebrarse el día de Todos los Santos. Este día caía en el 13 de mayo y en él se honraba a todos los mártires. A partir del siglo VIII la festividad fue trasladada al 1 de noviembre por orden del Papa Gregorio III con intención de hacer desaparecer la fiesta pagana de Samhain.
Por lo tanto, lo que hoy conocemos como Halloween no es más que la evolución de una serie de tradiciones y celebraciones que se vienen celebrando desde la antigüedad y a la que se le han ido añadiendo nuevos elementos más modernos y consumistas. En España aún hay regiones, como Galicia y Asturias, donde aún se celebra lo que ellos llaman "Samaín". (Info: blogs.20minutos.es)
¡¡FELIZ SAMHAIN!!
OTRO DÍA PERFECTO EN:
¡¡Ey!! Podéis encontrar más recetas de Halloween en el Especial Halloween que encontraréis pinchando AQUÍ :)