Qué mejor forma de comenzar este nuevo otoño con unas LENTEJAS CON CHORIZO. Es cierto que por aquí este verano no nos hemos privado de nada gastronómicamente hablando y ya apetecía volver a las comidas normales y sanas de todos los días.
Es un plato muy fácil de realizar, demasiado fácil, y tiene la ventaja de que incluso lo puedes dejar preparado de un día para otro. Así que animo a quien no las haya hecho nunca a que pruebe porque aunque las preparadas de lata te salvan de un apuro, no hay color.
Las lentejas además tienen muy buenas propiedades ya que aportan vitaminas del grupo B que ayudan a mantener el sistema nervioso en buen estado manteniendo a raya el mal humor y las depresiones. Contienen también Hierro, como bien sabemos todos, y un alto contenido en Zinc que las convierte en un alimento afrodisiaco.
¿Apetencen, verdad?..
INGREDIENTES:
- Lentejas pardinas (1 puñado por persona. El resto de ingredientes lo he calculado para 3 raciones aproximadamente).
- 1/4 ó media cebolla pequeña.
- 1 tomate rojo.
- 1 patata pequeña.
- 1 zanahoria pequeña.
- 1 trocito de pimiento rojo.
- 2 dientes de ajo enteros (sin pelar)
- 1 chorizo para guisar (en mi caso: ahumado asturiano).
- 1 hoja de laurel.
- Pimentón dulce.
- Comino molido (opcional).
- Colorante alimenticio o azafrán (opcional).
1. Antes de empezar a preparar las hortalizas metemos las lentejas en un cuenco con agua. Realmente las lentejas del tipo pardinas no necesitan remojo aunque yo suelo hacerlo para acortar el tiempo de cocción. Hay quien las deja toda la noche, yo sólo las meto durante un rato. No obstante, es recomendable lavarlas ya que contienen mucho polvo.
2. A continuación, pica en trozos pequeños la cebolla, el pimiento, la patata, la zanahoria y el tomate (pelado y retirando las pepitas).
3. Pon una olla al fuego con un churretón de aceite a fuego medio. Yo no suelo cubrir todo el fondo, con un chorrito para rehogar la verdura es suficiente. Cuando esté caliente añade la cebolla, el pimiento, los dos ajos (sin pelar), un poquito de sal y rehoga durante unos minutos.
4. Ahora añade la patata, la zanahoria y, tras volver a rehogar un poquito, por último añade el tomate picado. Remueve bien para que se haga la verdura. Es opcional pero en este paso puedes echar una pizquina de comino (muy poquito, una miseria, que le de un toque al guiso pero que no lo sature de ese sabor tan característico).
5. Ahora viene el paso del pimentón. Retira la olla del fuego, échale una cucharadita de pimentón y remueve bien (así evitamos que se queme). Después escurre las lentejas y añádelas a la olla. Mézclalas con el resto de ingredientes.
6. Sin necesidad de rehogarlas añadimos agua fría. Tiene que cubrirlas como dos dedos por encima de ellas. En este paso incorpora también el chorizo entero, la hoja de laurel y una cucharadita de sal. Aunque no sería necesario ya que el chorizo le da mucho sabor al guiso, podrías añadirle media pastillita de caldo de jamón concentrado, pero este paso es opcional. En este paso también podrías echarle una hebra de azafrán o un polvito de colorante alimenticio para resaltar el color (en esta ocasión yo no lo he echado porque el chorizo ya le aporta color).
7. Sube el fuego y cuando el guiso empiece a burbujear un poquito bájalo y tapa la olla para que se hagan lentamente. No se deberían remover mucho las lentejas para que no se deshagan, pero para controlar que no se peguen coge la olla y zarandéala suavemente o bien con una cuchara de madera y, también con suavidad, remuévelas. Es posible que cuando empiece a hervir salga una espumilla que es recomendable retirar con una espumadera.
8. En principio, con la cantidad de agua que hemos echado no sería necesario añadir más; no obstante, si ves que es necesario puedes ir añadiendo poco a poco.. ¡¡Ojo!!.. En el caso de las lentejas siempre agua fría.
9. Respecto al tiempo que tienen que estar cocinándose: entre 45 min y una hora. Es preferible que se hagan despacito a fuego medio-bajo.
OTRAS COSILLAS:
- Si quieres restarle calorías a este plato, puedes cocer a parte el chorizo para no aportar la grasa que suelta al guiso. O bien puedes ir quitando con una cuchara las balsitas de grasa que quedan en la superficie.
- Se puede sustituir el chorizo por unos taquitos de jamón serrano. En ese caso recomiendo que añadáis un poco de azafrán o colorante alimenticio al caldo para darle un toque de color. En estas lentejas no sería necesario porque el propio chorizo lo colorea.
- Si no os gusta mucho encontraros con los trocitos de las hortalizas, podéis batirlas. Para ello antes de añadir las lentejas vierte un poquito de agua y bate con una batidora las verduras ya rehogadas. A continuación, añade las lentejas, el agua fría y el chorizo y deja cocer. Si has decidido dejar alguna de las hortalizas sin batir (como la patata o la zanahoria) puedes incorporarlas en este último paso (a la vez que el chorizo) sin necesidad de rehogarlas.
- Si haces de más puedes congelarlas. Éso sí, en ese caso es recomendable que retires la patata porque al descongelarla no queda bien. Para que ésto sea más fácil, no cortes la patata tan chiquitita, déjala en trozos más grandes.
- Si el guiso se te queda muy líquido coge una cucharada de lentejas y aplástalas para volverlas puré. Luego incorpóralo al caldo y mezcla.
¿SABÍAS QUE..?
El logo de Chupa-Chups fue diseñado por Salvador Dalí. Fue en 1959 cuando el fundador de la marca Enric Bernat le pidió a Salvador Dalí que rediseñara el logotipo con la intención de lanzar la marca al mercado internacional. La forma de margarita, las letras en rojo sobre un fondo amarillo y la colocación del logo en la parte superior del envoltorio facilitando la visibilidad del mismo e infundiéndole personalidad al producto, fueron las acertadas aportaciones del artista. Actualmente el caramelo se comercializa en los cinco continentes.
- Si quieres restarle calorías a este plato, puedes cocer a parte el chorizo para no aportar la grasa que suelta al guiso. O bien puedes ir quitando con una cuchara las balsitas de grasa que quedan en la superficie.
- Se puede sustituir el chorizo por unos taquitos de jamón serrano. En ese caso recomiendo que añadáis un poco de azafrán o colorante alimenticio al caldo para darle un toque de color. En estas lentejas no sería necesario porque el propio chorizo lo colorea.
- Si no os gusta mucho encontraros con los trocitos de las hortalizas, podéis batirlas. Para ello antes de añadir las lentejas vierte un poquito de agua y bate con una batidora las verduras ya rehogadas. A continuación, añade las lentejas, el agua fría y el chorizo y deja cocer. Si has decidido dejar alguna de las hortalizas sin batir (como la patata o la zanahoria) puedes incorporarlas en este último paso (a la vez que el chorizo) sin necesidad de rehogarlas.
- Si haces de más puedes congelarlas. Éso sí, en ese caso es recomendable que retires la patata porque al descongelarla no queda bien. Para que ésto sea más fácil, no cortes la patata tan chiquitita, déjala en trozos más grandes.
- Si el guiso se te queda muy líquido coge una cucharada de lentejas y aplástalas para volverlas puré. Luego incorpóralo al caldo y mezcla.
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